La historia de Ana y Raúl es de las que da para escribir una novela. Ellos lo están haciendo, y esperamos que cuando la terminen, nos avisen. Su amor es pasional, como todos, pero también es sabio, meditado, cabal. En su relación se adivinan cicatrices que lo hacen todo más difícil, pero también más hermoso. Son ese tipo de personas con las que te gustaría sentarte a menudo sólo para que te cuenten sus historias. Si no fuera porque tanto ellos como nosotros estamos siempre a tope, nos encantaría juntarnos para que nos enseñaran su novela, para que nos contaran qué tal va su balanza vital y nos dedicaran alguna de esas sonrisas llenas de vida.
Os dejamos con su reportaje. Disfrutadlo. Merece la pena.