Hay bodas que consolidan una fuerza arrolladora, cargada de momentos intensos, de memorias compartidas. Los preparativos de Jose tuvieron lugar en un lugar inusual, muy importante para él. Allí había parte de su vida, de su identidad, y una parte de eso ha quedado reflejado en el reportaje. Para Vero también fue un día muy especial, sobre todo porque hubo un tiempo en que pensó que no llegaría. Hay alma en esta boda. Y hay ganas de celebrar y de bailar y de sacarlo todo.
¡Que seáis muy felices, chicos!